Cómo cuidar las plantas y flores en invierno

¿Qué tan hermoso es tu jardín? Césped maduro, plantas exuberante, flores florecidas y perfumadas… bueno, terminamos olvidándonos de todo esto en el invierno. Pero tu amado jardín necesita un cuidado sencillo incluso en la estación más fría, cuando a menudo se olvida de que existe y se descuida. Pedimos algunos consejos a Juan, nuestro jardinero de confianza que ya nos ha dado algunos consejos sobre el trabajo a realizar en el jardín en otoño.

Cuida el suelo

Lo fundamental a hacer durante el invierno es continuar con los trabajos iniciados a principios de la estación de otoño y cuidar el terreno que alberga el césped. Tu aliado es el sol, con su luz; el enemigo número uno es la humedad que puedes combatir con unos pequeños trucos:

1. Podar setos y plantas de hoja caduca: la reducción de setos y arbustos permite que la luz del sol se filtre más fácilmente y llegue al suelo y la hierba, aportando su efecto beneficioso. Maximizar las áreas de luz en invierno es nuestro mantra! En esta temporada es bueno podar solo las plantas que pierden sus hojas, para los árboles de hoja perenne es mejor esperar a la temporada de primavera. Esta tarea no siempre es un paseo por el parque y no todo el mundo puede hacerlo, pero si necesitas una mano, ¡nuestro servicio de poda podría ser para ti!
2. No pisar el césped: es el aspecto que más descuidamos. La hierba en invierno suele estar mojada, húmeda y cubierta por las heladas nocturnas. Pisoteándolo corremos el riesgo compactar demasiado el suelo en el que crece, impidiendo su crecimiento en la temporada de primavera. También es incorrecto quitar la nieve o el hielo con rastrillos o con sal; ambos pueden dañar seriamente el césped, ¡es mejor dejar que se derrita naturalmente!
3. Reducir el riego: el invierno trae a menudo abundante lluvia y humedad a nuestro jardín. Usualmente puedes cerrar riego sin problemas, evitando además que el sistema se dañe por las bajas temperaturas que congelan el agua dentro de las tuberías. La única excepción se concede en el caso de una temporada de lluvias especialmente mala para la que, excepcionalmente, es posible proceder con un riego muy limitado.
4. Elimina el agua estancada: sucede que en la época más fría se forman zonas sujetas a acumulaciones de agua que, al estancarse, pueden provocar daños en el suelo y el césped. Un truco para evitar esto es perforar agujeros en el suelo para asegurar un buen drenaje.
5. Evita fertilizar el césped: esta actividad se puede reanudar fácilmente en primavera, hacerlo demasiado temprano puede favorecer el crecimiento de la hierba y los efectos de los daños que pueda sufrir, con el riesgo de que se arruine durante la temporada de verano. La única excepción es la presencia de musgo.

Musgo

A veces, incluso si seguimos todos los consejos anteriores al pie de la letra, algo puede salir mal. Es entonces cuando eso aparece musgo, una de las peores cosas que le pueden pasar a nuestro terreno:(
Afortunadamente hay buenos remedios: podemos utilizar productos especiales para eliminarlo y, una vez eliminado, use una pequeña dosis de fertilizante para ayudar a que el césped crezca más exuberante que antes. Cuando hacerlo? No existe una regla precisa, pero es bueno actuar antes del primer corte estacional.

El primer corte de hierba

¿Cuándo debes empezar de nuevo a cortar la hierba? La respuesta depende de cómo fue la temporada de invierno y la temperatura. Si las condiciones meteorológicas lo permiten, se puede realizar el primer corte entre finales de febrero y finales de marzo. Un consejo: no corte el césped demasiado bajo, 4-5 centímetros de altura pueden ser suficientes y evitar el riesgo de que la hierba detenga demasiado su crecimiento.

Cuida las plantas y las flores

Merecen una discusión por separado plantas y flores. Si son plantas de maceta es apropiado guárdalos dentro, en casa, en un garaje, o lo que sea en un ambiente más faborable. Si el lugar es particularmente húmedo, el consejo es usar paja y ponerla en la maceta sobre el suelo para proteger la planta. Lo mismo ocurre con las flores más delicadas, que temen el frío y las bajas temperaturas.

Pero si te encanta tener un jardín de flores incluso en invierno puedes plantar algunas flores que no le tengan miedo al frio, como violetas, campanillas de invierno o algunas especies de hierbas para decoración. Si tienes un Huerta, o está planeando dedicar un área de su jardín a una cama de flores en la temporada de primavera, puede cubrir la tierra con un hoja protectora de nailon para evitar que crezcan demasiadas malas hierbas y musgo. Una vez pasados ​​los últimos coletazos del invierno, podrás realizar la siembra de las flores y hortalizas que elijas.

Preparación del suelo para la primavera: aireación.

Incluso el césped se puede preparar mejor para la primavera con la aireación. Esta práctica permite que el agua (y, si la utilizas, el abono) penetre profundamente y le dé nueva vida a tu césped para la llegada de la primavera. ¿Cómo lo haces?

• Un método de «hágalo usted mismo» es practicar dioses agujeros en el suelo con un tenedor.
• El método más eficaz es utilizar una herramienta adecuada, el aireador, equipado con un motor.

Este tipo de intervención es ciertamente más delicada y requiere de un equipo profesional que no todo el mundo tiene en su garaje. Para ello es bueno acudir a expertos, si nunca lo ha hecho.

El socio adecuado

Estos son solo algunos de los consejos que puedes poner en práctica de forma independiente, puedes encontrar otros a la vista de las primeras intervenciones primaverales en tu jardín en este artículo de nuestro blog, pero en cualquier caso si necesitas el consejo de un especialista o equipo específico, puedes contactar con nuestros jardineros quienes te pueden ayudar con todos los servicios que tu jardín necesita, desde cortar el césped hasta crear el césped. Juntos podéis definir las intervenciones más adecuadas para conseguir lo que tenéis en mente en función de los metros cuadrados, el terreno y tu gusto estético por comience a preparar el jardín ideal de inmediato ¡qué estás esperando!